miércoles, 5 de marzo de 2014

4° Lectura Judit 3


1 Entonces le enviaron mensajeros con la siguiente propuesta de paz:
2 «Aquí estamos los servidores del gran rey Nabucodonosor, rendidos ante ti: trátanos como mejor te parezca.
3 Están a tu disposición nuestras posesiones, todo nuestro suelo, todos los campos de trigo, nuestras ovejas y nuestras vacas, y también todos los corrales de nuestros campamentos: puedes hacer con ellos lo que quieras.
4 Hasta nuestras mismas ciudades y sus habitantes están a tu servicio; ven y trátalas como te parezca».
5 Aquellos hombres se presentaron ante Holofernes y le transmitieron su mensaje.
6 El descendió con su ejército hacia la costa del mar, estableció guarniciones en las plazas fuertes y reclutó en ellas hombres selectos como tropas auxiliares.
7 Ellos, y toda la región circunvecina, lo recibieron con guirnaldas y danzas corales al son de los tambores.
8 Pero él devastó todo su territorio y taló sus bosques sagrados, porque había recibido la orden de exterminar a todos los dioses del país, para hacer que todas las naciones adoraran solamente a Nabucodonosor, y todas sus lenguas y tribus lo invocaron como dios.
9 Así llegó Holofernes a Esdrelón, en las inmediaciones de Dotaim, que está ante las montañas de Judea.
10 Acampó entre Gueba y Escitópolis y permaneció allí un mes, a fin de reunir todos los efectivos de su ejército.

Lecturas del mes de Marzo

En el tercer mes de Leamos la Biblia en 1 año continuamos leyendo el evangelio de Mateo y el libro de los Proverbios. Comenzamos a su vez a leer: Levítico, Judit, Eclesiastés, Números y Cantares. Antes de detallar las lecturas, haré unos comentarios para introducir los libros:

  1. El Evangelio de Mateo se atribuye a Mateo Leví, un recaudador de impuestos a quien Jesús llamó para que le siguiera como uno de sus apóstoles.
  2. El libro Levítico se denomina así porque se trata de un manual religioso para uso de los levitas, sacerdotes encargados del culto, escogidos de entre los miembros de la tribu de Leví. Se trata de un texto difícil de interpretar para el lector moderno porque constituye un libro típico y absolutamente judío. A pesar de ello Levítico es un libro que presenta interés y sorprendentes trazos de la vida religiosa y moral judía de aquellos tiempos. La primera parte del Levítico está dedicada al ritual de los sacrificios (caps. 1-7). Luego vienen el ceremonial para la investidura de los sacerdotes (caps. 8-10), y la ley sobre lo puro y lo impuro (caps. 11-15), que concluye con el ritual para el gran Día de la Expiación (cap. 16) que vamos a leer el proximo 09/03/2014. Los caps. 17-26 contienen la así llamada "Ley de Santidad", que se cierra con una serie de bendiciones y maldiciones. A modo de Apéndice, el 15/03/2014 leeremos el cap. 27 que determina las condiciones para el rescate de las personas, los animales y los bienes consagrados al Señor.
  3. El libro de los proverbios es una colección de máximas o sentencias de contenido religioso o moral que tradicionalmente se atribuyen al Rey Salomon. El objetivo de este libro es transmitir la sabiduría de los antepasados hasta nuestros días y la mayoría de los consejos son validos a pesar de los miles de años transcurridos.
  4. Judit es una verdadera obra literaria, un relato de ficción con fines marcadamente religiosos o narración edificante. El autor utiliza elementos históricos, pero a sabiendas de que no corresponden a la realidad histórica según las coordenadas del tiempo y del espacio. Su relato y sus personajes son tan históricos como los de una obra dramática que se inspira en la realidad pero no es real. Esto genera controversias acerca de la canonicidad del texto. Judíos y protestantes lo consideran apócrifo y por lo tanto lo excluyen de sus Biblias, aunque los católicos lo aceptan, llamándole Deuterocanónicos
  5. Eclesiastés
  6. Números
  7. Cantares
MARZO
1. Mateo 8.23-34 / Levítico 1-2 / Proverbios 19 / Judit 1
2. Mateo 9.1-17 / Levítico 3-4 / Proverbios 20
3. Mateo 9.18-38 / Levítico 5-6 / Proverbios 21 / Judit 2
4. Mateo 10.1-25 / Levítico 7-8 / Proverbios 22
5. Mateo 10.26-42 / Levítico 9-10 / Proverbios 23 / Judit 3
6. Mateo 11.1-19 / Levítico 11-12 / Proverbios 24
7. Mateo 11.20-30 / Levítico 13 / Proverbios 25 / Judit 4
8. Mateo 12.1-21 / Levítico 14 / Proverbios 26
9. Mateo 12.22-50 / Levítico 15-16 / Proverbios 27 / Judit 5
10. Mateo 13.1-23 / Levítico 17-18 / Proverbios 28
11. Mateo 13.24-58 / Levítico 19 / Proverbios 29 / Judit 6
12. Mateo 14.1-21 / Levítico 20-21 / Proverbios 30
13. Mateo 14.22-36 / Levítico 22-23 / Proverbios 31 / Judit 7
14. Mateo 15.1-20 / Levítico 24-25 / Eclesiastés 1.1-11
15. Mateo 15.21-39 / Levítico 26-27 / Eclesiastés 1.12-2.26 / Judit 8
16. Mateo 16 / Números 1-2 / Eclesiastés 3.1-15
17. Mateo 17 / Números 3-4 / Eclesiastés 3.16-4.16 / Judit 9
18. Mateo 18.1-17 / Números 5-6 / Eclesiastés 5
19. Mateo 18.18-35 / Números 7-8 / Eclesiastés 6 / Judit 10
20. Mateo 19.1-15 / Números 9-10 / Eclesiastés 7
21. Mateo 19.16-30 / Números 11-12 / Eclesiastés 8 / Judit 11
22. Mateo 20.1-16 / Números 13-14 / Eclesiastés 9.1-12
23. Mateo 20.17-34 / Números 15-16 / Eclesiastés 9.13-10.20 / Judit 12
24. Mateo 21.1-27 / Números 17-18 / Eclesiastés 11.1-8
25. Mateo 21.28-46 / Números 19-20 / Eclesiastés 11.9-12.14 / Judit 13
26. Mateo 22.1-22 / Números 21 / Cantares 1.1-2.7
27. Mateo 22.23-46 / Números 22.1-40 / Cantares 2.8-3.5 / Judit 14
28. Mateo 23.1-12 / Números 22.41-23.26 / Cantares 3.6-5.1
29. Mateo 23.13.39 / Números 23.27-24.25 / Cantares 5.2-6.3 / Judit 15
30. Mateo 24.1-31 / Números 25-27 / Cantares 6.4-8.4
31. Mateo 24.32-51 / Números 28-29 / Cantares 8.5-14 / Judit 16

3° Lectura Proverbios 23


23 1 Si te sientas a la mesa con un señor, fíjate bien en lo que tienes delante; 
2 clava un cuchillo en tu garganta,si tienes mucho apetito. 

3 No ambiciones sus manjares,porque son un alimento engañoso. 

4 No te afanes por enriquecerte,deja de pensar en eso. 

5 Tus ojos vuelan hacia la riqueza, y ya no hay nada,porque ella se pone alasy vuela hacia el cielo como un águila. 

6 No comas el pan del hombre maliciosoni codicies sus manjares, 
7 porque él es en realidad como piensa dentro de sí:"Come y bebe", te dice,pero su corazón no está contigo. 

8 El bocado que comiste, lo vomitarás,y habrás desperdiciado tus lindas palabras.

9 No hables a los oídos de un insensato,porque despreciará el buen sentido de tus palabras. 

10 No desplaces los linderos antiguos,ni te metas en los campos de los huérfanos, 
11 porque su Vengador es poderosoy defenderá su causa contra ti. 

12 Abre tu corazón a la instruccióny tus oídos a las palabras de la ciencia. 

13 No mezquines la corrección a un niño:si lo golpeas con la vara, no morirá. 

14 Tú lo golpearás con la vara,y librarás su vida del Abismo. 

15 Hijo mío, si tu corazón es sabio,también se alegrará mi corazón: 
16 mis entrañas se regocijarán,cuando tus labios hablen con rectitud. 

17 Que tu corazón no envidie a los pecadores,sino que siempre tema al Señor. 

18 Así, ciertamente, tendrás un porveniry tu esperanza no quedará defraudada. 

19 Escucha, hijo mío, y te harás sabio,y enderezarás tu corazón por el buen camino. 

20 No te juntes con los borrachos ni con los que se hartan de carne, 
21 porque el borracho y el glotón se empobrecen,y la modorra hace andar vestido con harapos. 

22 Escucha a tu padre, que te engendró,y no desprecies a tu madre cuando sea vieja. 

23 Adquiere la verdad y no la vendas,lo mismo que la sabiduría, la instrucción y la inteligencia. 

24 El padre de un justo se llena de gozo,el que tiene un hijo sabio se alegra por él: 
25 ¡que se alegren tu padre y tu madrey se llene de gozo la que te hizo nacer! 

26 Hijo mío, préstame atención y acepta de buena gana mis caminos. 

27 Porque la prostituta es una fosa profunday la mujer extraña, un pozo estrecho: 
28 también ella está al acecho como un ladrón y multiplica las traiciones entre los hombres. 

29 ¿Para quién los lamentos? ¿Para quién los quejidos?¿Para quién las querellas? ¿Para quién los suspiros?
¿Para quién las heridas sin motivo?¿Para quién la mirada turbia? 

30 Para los que se la pasan bebiendoy van en busca de vino aromatizado. 

31 No mires el vino: ¡qué rojo es!¡Cómo centellea en la copa! ¡Cómo fluye suavemente!

32 Pero al fin muerde como una serpiente y pica como una víbora. 

33 Tus ojos verán cosas extrañas,tu corazón hablará sin ton ni son;
34 serás como un hombre acostado en alta mar,acostado en la punta de un mástil. 

35 "Me han golpeado, pero no me dolió;me han pegado, pero no me di cuenta.
¿Cuándo me despertaré? ¡Volveré a pedir más todavía!". 

2° Lectura Levítico 9-10


Capítulo 9: Levítico 9
Los primeros sacrificios de Israel

9 1 Al octavo día, Moisés llamó a Aarón y a sus hijos, y a los ancianos de Israel, 2 y dijo a Aarón: "Toma un ternero para un sacrificio por el pecado, y un carnero para un holocausto, ambos sin ningún defecto, y preséntalos delante del Señor.

3 Después di a los israelitas: ‘Tomen un chivo para ofrecerlo como sacrificio por el pecado; un ternero y un cordero, de un año y sin defecto, para un holocausto; 4 y traigan también un toro y un carnero para inmolarlos delante del Señor, en sacrificio de comunión. Además de esto, preparen una oblación amasada con aceite. Porque hoy el Señor se manifestará a ustedes’".

5 Ellos pusieron frente a la Carpa del Encuentro todo lo que Moisés les había ordenado, y la comunidad en pleno se acercó y permaneció de pie delante del Señor.

6 Entonces Moisés dijo: "El Señor les ordena hacer estas cosas, para que su gloria se manifieste a ustedes".

7 Después dijo a Aarón: "Acércate al altar, ofrece tu sacrificio por el pecado y tu holocausto, y realiza así el rito de expiación por ti y por tu familia; presenta también la ofrenda del pueblo, y practica el rito de expiación en favor de ellos, como el Señor lo ha ordenado".

8 Aarón se acercó al altar e inmoló el ternero del sacrificio por su propio pecado.

9 Sus hijos le presentaron la sangre de la víctima, y él, mojando su dedo, puso un poco de sangre sobre los cuernos del altar y derramó el resto sobre la base del mismo.

10 Luego hizo arder sobre el altar la grasa, los riñones y la protuberancia del hígado, extraídos de la víctima del sacrificio por el pecado, como el Señor lo había ordenado a Moisés.

11 La carne y el cuero, en cambio, los quemó fuera del campamento.

12 En seguida inmoló la víctima del holocausto, y sus hijos le presentaron la sangre, con la que él roció todos los costados del altar.

13 Luego le trajeron la víctima cortada en pedazos, juntamente con la cabeza, y él los hizo arder sobre el altar.

14 Después de lavar las entrañas y las patas, también las hizo arder sobre el altar junto con el holocausto.

15 Luego presentó la ofrenda del pueblo: tomó el chivo del sacrificio por el pecado del pueblo, lo inmoló y lo ofreció como había hecho con el anterior.

16 Ofreció el holocausto conforme al ritual, 17 y presentó la oblación, de la cual extrajo un puñado, que hizo arder sobre el altar, junto con el holocausto de la mañana.

18 También inmoló el toro y el carnero del sacrifico de comunión ofrecido por el pueblo. Sus hijos le trajeron la sangre, y con ella roció todos los costados del altar.

19 Todas las partes grasosas del toro y del carnero –la cola, la grasa que recubre las entrañas, los riñones y la protuberancia del hígado– 20 fueron depositadas sobre los pechos de las víctimas. Aarón hizo arder las partes grasosas sobre el altar, 21 mientras que con el pecho y la pata derecha de los animales, hizo el gesto de presentación delante del Señor, como Moisés lo había ordenado.

22 Finalmente, Aarón extendió sus manos hacia el pueblo y lo bendijo.

Capítulo 10: Levítico 10
El castigo de Nadab y Abihú

10 1 Nadab y Abihú, hijos de Aarón, tomaron cada uno su incensario, pusieron fuego en ellos y echaron incienso encima; pero el fuego que presentaron delante del Señor era un fuego profano, contrariamente a lo que él les había mandado.

2 Entonces salió de la presencia del Señor un fuego que los devoró, y ambos murieron delante del Señor.

3 Moisés dijo a Aarón: "Así se cumple la palabra del Señor:
Manifestaré mi santidad en aquellos que se acercan a mí, y a la vista de todo el pueblo seré glorificado." Aarón, por su parte, permaneció en silencio.

El retiro de los cadáveres

4 Moisés llamó a Misael y a Elsafán –hijos de Oziel, el tío paterno de Aarón– y les dijo: "Vengan a retirar a sus hermanos de la entrada del Santuario, y llévenlos fuera del campamento".

5 Ellos se acercaron y los llevaron en sus túnicas fuera del campamento, como Moisés lo había ordenado.

6 Luego Moisés dijo a Aarón y a los otros hijos de este, Eleazar e Itamar: "No vayan con los cabellos sueltos ni desgarren sus vestiduras, porque de lo contrario morirán y el Señor se irritará contra toda la comunidad. Que sus hermanos y toda la familia de Israel lloren más bien por el fuego que ha encendido el Señor.

7 Y no se alejen de la entrada de la Carpa del Encuentro, para que no mueran, porque el óleo de la unción del Señor está sobre ustedes". Ellos hicieron lo que Moisés les dijo.

La prohibición de bebidas alcohólicas

8 Entonces el Señor dijo a Aarón:

9 Cuando tengan que entrar en la Carpa del Encuentro, ni tú ni tus hijos beberán vino o cualquier otra bebida que pueda embriagar, porque de lo contrario morirán: este es un decreto válido para siempre, a lo largo de las generaciones.

10 Así ustedes podrán discernir lo sagrado de lo profano y lo puro de lo impuro, 11 y enseñar a los israelitas todos los preceptos que el Señor les ha dado por intermedio de Moisés.

Los derechos de los sacerdotes

12 Moisés dijo a Aarón y a Eleazar e Itamar, los hijos que le habían quedado: "Tomen la oblación que sobre de las ofrendas que se queman para el Señor, y cómanla junto al altar, sin hacerla fermentar, porque es una cosa santísima.

13 La comerán en el recinto sagrado, porque esa es la porción de las ofrendas que se queman para el Señor, sobre la que tienen derecho tú y tus hijos, conforme a la orden que recibí.

14 Tú, lo mismo que tus hijos y tus hijas, comerán en un lugar puro el pecho presentado al Señor y la pata reservada, porque ese es tu derecho y el de tus hijos, sobre los sacrificios de comunión ofrecidos por los israelitas.

15 Además de las partes grasosas destinadas a la ofrenda que se quema para el Señor, ellos ofrecerán la pata y el pecho de la víctima, para realizar el gesto de presentación delante del Señor. Esas partes pertenecerán a ti y a tus hijos, como un derecho válido para siempre, porque el Señor así lo ha ordenado".

Disposición acerca del sacrificio por el pecado

16 Moisés preguntó entonces por el chivo del sacrificio por el pecado. Al enterarse de que ya había sido quemado, se irritó contra Eleazar e Itamar, los hijos de Aarón que habían sobrevivido, y exclamó:

17 "¿Por qué no comieron la víctima del sacrificio por el pecado en el recinto sagrado, ya que se trata de una cosa santísima, que el Señor les dio para borrar el pecado de la comunidad, practicando el rito de expiación en favor de ella, delante del Señor?

18 Supuesto que su sangre no fue llevada al interior del Santuario, tendrían que haberla comido en el recinto sagrado, como yo lo ordené".

19 Entonces Aarón respondió a Moisés: "Mis hijos presentaron hoy delante del Señor su sacrificio por el pecado y su holocausto, y a pesar de todo, tuve la desgracia de perderlos. Si yo hubiera comido hoy de la víctima del sacrificio por el pecado, ¿el Señor lo habría aprobado?".

20 Al oír esto, Moisés quedó satisfecho.

1° Lectura Mateo 10.26-42

26 No les teman. No hay nada oculto que no deba ser revelado, y nada secreto que no deba ser conocido.

27 Lo que yo les digo en la oscuridad, repítanlo en pleno día; y lo que escuchen al oído, proclámenlo desde lo alto de las casas.

28 No teman a los que matan el cuerpo, pero no pueden matar el alma. Teman más bien a aquel que puede arrojar el alma y el cuerpo a la Gehena.

29 ¿Acaso no se vende un par de pájaros por unas monedas? Sin embargo, ni uno solo de ellos cae en tierra, sin el consentimiento del Padre que está en el cielo.

30 Ustedes tienen contados todos sus cabellos.


31 No teman entonces, porque valen más que muchos pájaros. 

32 Al que me reconozca abiertamente ante los hombres, yo lo reconoceré ante mi Padre que está en el cielo. 

33 Pero yo renegaré ante mi Padre que está en el cielo de aquel que reniegue de mí ante los hombres.

34 No piensen que he venido a traer la paz sobre la tierra. No vine a traer la paz, sino la espada. 

35 Porque he venido a enfrentar al hijo con su padre, a la hija con su madre y a la nuera con su suegra; 36 y así, el hombre tendrá como enemigos a los de su propia casa.

37 El que ama a su padre o a su madre más que a mí, no es digno de mí; y el que ama a su hijo o a su hija más que a mí, no es digno de mí.

38 El que no toma su cruz y me sigue, no es digno de mí.

39 El que encuentre su vida, la perderá; y el que pierda su vida por mí, la encontrará.

40 El que los recibe a ustedes, me recibe a mí; y el que me recibe, recibe a aquel que me envió.

41 El que recibe a un profeta por ser profeta, tendrá la recompensa de un profeta; y el que recibe a un justo por ser justo, tendrá la recompensa de un justo. 

42 Les aseguro que cualquiera que dé de beber, aunque sólo sea un vaso de agua fresca, a uno de estos pequeños por ser mi discípulo, no quedará sin recompensa".